El cambio de silla debe hacerse cuando el niño supera la altura máxima permitida por el modelo actual, nunca solo por la edad. Es importante no adelantar el cambio de grupo antes de tiempo, ya que las sillas de cada grupo están diseñadas para ofrecer la máxima protección según la talla del niño. Por ejemplo, aunque un niño tenga la edad para pasar a una silla con cinturón, si todavía entra bien en la silla con arnés, es mucho más seguro mantenerlo ahí hasta que alcance el límite de altura.